Dirigido a grandes y medianas empresas que buscan certificarse en BPM ante el  Invima y cumplir con lo establecido en el decreto 3075 de 1997 y la resolución 2674 de  2013, emitido por el Ministerio de Salud, en donde se determinan las directrices en la ejecución en los procesos necesarios para garantizar la calidad e inocuidad de los alimentos.   


Metodología: 

1. Diagnóstico

Es importante conocer las condiciones en las que se encuentra la empresa referente a:

  • Instalaciones físicas – sanitarias.
  • Personal manipulador de alimentos.
  • Condiciones de saneamiento, proceso  y fabricación.
  • Aseguramiento y control de calidad.

Esto para realizar una evaluación y/o verificación comparativa con la norma, donde se enuncian  sugerencias y observaciones que se aplican para la implementación de las BPM.


2. Recomendaciones para el Diseño Sanitario

Realizado el diagnóstico se procede a dar las sugerencias y medidas correctivas para cumplimiento de las normas sanitarias y la adecuación de las BPM. 


3. Elaboración de los Programas (Registros y Cronogramas):

Los programas a elaborar son los siguientes:

  • Programa de Buenas Prácticas de Manufactura (BPM).
  • Programa de Trazabilidad.
  • Programa de Calibración.
  • Programa de Proveedores.
  • Programa de Mantenimiento de Equipos. 
  • Programa de Capacitación.
  • Planes de Saneamiento:
    • Programa de Limpieza y Desinfección.
    • Programa de Control de Plagas.
    • Programa de Residuos Sólidos y Líquidos.
    • Programa de Abastecimiento o Suministro de Agua Potable.

4. Capacitación:

Es importante que todo el personal de la empresa en el desarrollo de sus actividades diarias aplique el conocimiento de la implementación de las BPM donde se estipulan las directrices en sanidad necesarias para garantizar la calidad de los alimentos.


5. Beneficios:

  • Implementar uno de los sistemas de aseguramiento de calidad sanitaria. 
  • Monitorizar cada etapa de los procesos para detectar posibles anomalías y ejecutar los correctivos correspondientes.
  • Al cumplir las normas e implementar las BPM, se toman en cuenta todas las medidas sanitarias y de seguridad que se requieren para producir alimentos inocuos, y así tener un mayor nivel de confianza  en la calidad de los productos que se elaboran.
  • Disminuir los costos de producción con la estandarización de los procesos.

Registros Relacionados