Desde el 9 de agosto de 2016, el gobierno nacional inició la implementación de una normatividad (Decreto 1500 de 2007, Decreto 2270 de 2012 y Decreto 1282 de 2016) y el Invima; autoridad sanitaria que inspecciona, vigila y controla la etapa de transformación productiva de la carne, busca reducir las enfermedades transmitidas por alimentos (ETAS), que son producidas por la ingestión de alimentos y /o agua contaminados con agentes infecciosos como bacterias, virus, hongos, parásitos que en la luz intestinal pueden multiplicarse y alcanzar otros órganos ; o toxinas formadas en tejidos de plantas o animales , o de productos metabólicos de microorganismos en los alimentos y pueden producir en las personas diarrea, vomito, deshidratación y la muerte.

La contaminación de los alimentos puede producirse en cualquier etapa del proceso que va de la producción al consumo de alimentos, para ello el implementar las Buenas Prácticas de Manufactura (BPM) en el hogar y en el lugar donde se compren los alimentos reducirán las enfermedades.

En el año 2014 el 53% de los brotes ocurrieron en el hogar, 14% en establecimientos educativos, 12,8% en otro tipo de establecimiento y el 11,7% en restaurantes.

Es por esto que se recomienda tomar las siguientes medidas preventivas:

 

BPM en el hogar:

1.                  Lavarse las manos con agua y jabón antes de manipular la carne

2.                  Mantener la cadena de frio, seleccionando la carne al último momento de hacer el mercado (ya se consiguen bolsas isotérmicas en tiendas de cadena que mantienen el producto hasta tres horas en la temperatura inicial en la que se compró), al llegar a casa refrigerar o congelar.

3.                  Separar siempre los alimentos crudos de los cocinados

4.                  Porcionar y congelar la carne si no la va a consumir el mismo día. Porcionar permite descongelar  

5.                  Una vez descongelada use la carne inmediatamente.

6.                  La descongelación debe hacerse en el refrigerador o en el horno microondas.

 

BPM en el lugar de compra:

1.      Compre en sitios que se encuentran limpios, iluminados , y sin presencia de plagas.

2.      Verifique que las personas encargadas de la manipulación de la carne cuenten con tapabocas, peto protector, gorro y botas plásticas.

3.      La carne debe estar en congelador o vitrina que aseguren cadena de frío y contar con fecha de vencimiento, número de lote y peso.

4.      Verifique el color, olor , textura

5.      Verifique que los utensilios como sierras, tablas, ganchos, pesas, no sean de madera o hierro.


fuente: https://www.invima.gov.co/